Florantinas
Saxisfraga Stolonífera Tricolor
Saxisfraga Stolonífera Tricolor
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La Saxifraga stolonifera 'Tricolor' es una variedad encantadora de la especie Saxifraga stolonifera, comúnmente conocida como Saxífraga Estolonífera, Begonia Fresa, Geranio Fresa o Madre de Miles. La adición de 'Tricolor' en su nombre se debe a la atractiva combinación de tres colores que presenta en sus hojas: verde, blanco (o crema) y rosa.
La característica más distintiva de la Saxifraga stolonifera 'Tricolor' son sus hojas redondas o reniformes (con forma de riñón) de color verde grisáceo, con márgenes irregulares de color blanco cremoso a rosa, y a menudo con la parte inferior de un tono rojizo o burdeos. La intensidad del color rosa puede variar según la luz que reciba la planta, siendo más pronunciado con buena luz indirecta e incluso un poco de sol suave de la mañana o la tarde. Las hojas tienen una textura ligeramente vellosa.
Es una planta perenne de porte rastrero o colgante. Produce unos tallos delgados y rojizos llamados estolones (de ahí su nombre stolonifera), similares a los de las fresas, en cuyos extremos se desarrollan pequeñas plántulas o "hijuelos". Estos hijuelos pueden echar raíces al entrar en contacto con el sustrato, permitiendo que la planta se propague fácilmente y cubra áreas extensas o cuelgue de macetas.
En primavera y verano, produce delicadas flores blancas, pequeñas y con pétalos desiguales, que se elevan en tallos delgados por encima del follaje. A menudo tienen un centro amarillo.
Familia: Saxifragaceae
Origen: Asia
- Luz: Prefiere la luz brillante indirecta. Demasiada luz solar directa, especialmente en las horas centrales del día, puede quemar sus hojas variegadas. Una ventana orientada al este u oeste suele ser ideal. La falta de luz puede hacer que los colores de las hojas se desvanezcan.
- Riego: El riego debe ser regular, manteniendo el sustrato ligeramente húmedo pero no encharcado. Permite que la capa superior del sustrato se seque antes de volver a regar para evitar la pudrición de las raíces. En invierno, reduce la frecuencia de riego.
- Sustrato: Necesita un sustrato con buen drenaje y rico en materia orgánica. Una mezcla estándar para macetas con perlita o fibra de coco añadida puede ser adecuada.
- Humedad: Prefiere una humedad moderada a alta. Si el ambiente es muy seco, especialmente en invierno con la calefacción, puedes aumentar la humedad colocando la maceta sobre un plato con guijarros húmedos o usando un humidificador. Evita rociar las hojas con frecuencia debido a su textura vellosa, que puede retener agua y favorecer la aparición de hongos.
- Temperatura: Prefiere temperaturas frescas a templadas, idealmente entre 15°C y 24°C. Evita las temperaturas extremas y las corrientes de aire frío.
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